Durante este mes escuché cada día: -le voy a pedir a Papá Noel ésto , lo otro o aún mejor "todo"-.
Y ahí está Papá Noel para atender todas las peticiones...
Me encantan las hipótesis sobre como hace para recorrer en una noche el mundo o de donde saca tantos regalos.
Pero qué pasa cuando el bueno de Santa no llega a "fabricar" todos los regalos pedidos. Qué es más educativo: que la lista de regalos y los paquetes en el árbol sean iguales o qué siempre falte alguno? Pues yo no sé, pero si sé que en la abundancia radica el menosprecio.
Hay tantos niños que juegan más con el envoltorio que con el juguete...
Y qué opinan ustedes de esos juguetes de "moda" que le cuesta tanto esfuerzo conseguir a Papá Noel y que en pocos días quedan relegados por otros nuevos?
Sigue siendo una apuesta segura el balón para ellos y la muñeca para ellas? Quizás sea más enriquecedor abrir el campo de interés hacia otras cosas no tan "comerciales" y que despierten la creatividad, la observación y la experimentación.
Sabemos que Los Reyes Magos y Papá Noel todo lo saben y todo lo ven; entonces les propongo que antes de envolver los regalos piensen en "la" o "el" futuro dueño de ese presente:
- Edad
- Género
- Gustos y preferencias, entre otras muchas cosas.
Y que observen el resto de juguetes que ya tiene. Siempre se pueden hacer variantes sobre el mismo tema, ej.:
ANIMALES:
- pelis
- libros
- dominó
- puzles
- bloque de construcciones temáticos
- libros para colorear
- video juegos
- música, etc.
Y por último mi mayor premisa: que sea cual sea nuestra creencia o religión, "Fiestas" sea sinónimo de "Familia" y "Familia" lo sea de : cariño, unión, respeto, amor,...
Por eso:
2010
